¡Viva Cuba libre con Espana ! y ¡Viva el general Prim ! ¡Abajo las contribuciones ! Con estas declaraciones enganosas dadas en diferentes puntos del Departamento Oriental empezó la primera guerra civil de Cuba. Las noticias de lo ocurrido en la Península, recibidas en La Habana junto con las de los sucesos de Lares, se trasmitieron rápidamente a los afiliados en las logias masónicas del Camagüey y del departamento Oriental. Pero para el Teniente Gobernador de Bayamo, Don Julián Udaeta, la esperada asonada de principios de octubre, liderada por Céspedes, no representaba una gran amenaza. Las cosas se calmarían por sí solas porque la gente de bien hablando se entiende ; y si no bastara el interés general para atemperar los ardores insurrectos, la tropa acantonada en Manzanillo enseguida le pondría coto a la revuelta. Cuando días más tarde entregó sin disparar casi un tiro la ciudad a sus "paisanos" , todavía creía que sus "hermanos" escucharían la voz de la razón antes de que fuera demasiado tarde ¿Acaso no eran todos espanoles unidos por el interés común del Progreso de la Patria ? Foto de portada, Llegar a viejo en Cuba, por Denys Almaral.
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